Fundamentos Pedagógicos de la Educación Holística II

por Valentín García

Fundamentos Pedagógicos de la Educación Holística II

Retomamos los Fundamentos de la Educación Integral Holística II

-La Filosofía Perenne: 

Podemos considerar hoy la Filosofía Perenne como una continuación de la “Sabiduría antigua”. El término “Filosofía Perenne” fue acuñado por Leibniz y difundido por Aldous Huxley a través de su libro “La Filosofía Perenne”, de 1945. El educador holístico Ramón Gallegos Nava, en su libro “Educación holísta, pedagogía del amor incondicional”, considera que la Filosofía Perenne es el corazón de la Educación Holística y uno de sus principios esenciales. Dice que es “espiritualidad genuina que ha permanecido oculta, a lo largo de las épocas, detrás de nombres y formas esperando desplegarse en el interior de cada ser humano”.

– Informes y documentos de la Unesco sobre educación:   

– Aprender a ser. La educación del futuro (Informe Faure, 1972).

– La educación encierra un tesoro (Informe Delors, 1996).

– Replantear la educación. ¿Hacia un bien común mundial? (2015).

– Los futuros de la educación: aprender a convertirse (2021)

– La musique dans  l’éducation. Armand Colin. Paris (1953)

– Los siete saberes necesarios para la educación del futuro (1999). E. Morin

La Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), ha llevado a cabo diferentes informes y publicaciones sobre educación, dando a entender la necesidad de garantizar una nueva educación más acorde con los tiempos y las circunstancias en las que se desarrolla la humanidad actual. Es decir, una educación centrada en la formación humana integral, que ayude a desarrollar la totalidad de la inteligencia y las potencialidades del ser humano.

El Informe Faure “Aprender a ser. La educación del futuro”, de 1972, es un medio útil y adecuado para transformar la educación con el fin de enseñar a las personas cómo realizarse creativamente, y demostrar que, más allá de un cierto punto de confort material, es mucho más sensato invertir energía en la mejora de las relaciones humanas.

El Informe Delors “La educación encierra un tesoro”, de 1996, se llevó a cabo por una Comisión Especial, convocada por el entonces Director General de la UNESCO, D. Federico Mayor Zaragoza, y cuyo objetivo era reflexionar sobre la educación y el aprendizaje en el siglo XXI. Habla de una educación basada en los paradigmas del aprendizaje a lo largo de toda la vida, y de los cuatro pilares pedagógicos: “aprender a ser”, “aprender a conocer”, “aprender a hacer” y “aprender a vivir juntos”.

El Informe “Replantear la educación. ¿Hacia un bien común mundial?”, de 2015. En él aparece el término holístico referido a la educación. En concreto, al tratar de los avances de las neurociencias, hace referencia a “la necesidad de enfoques holísticos que tengan en cuenta la estrecha interdependencia del bienestar físico e intelectual, así como las interacciones del cerebro emocional y cognitivo, analítico y creativo”.

Los dos principios fundamentales de este Informe son:

• Garantizar el derecho a una educación de calidad a lo largo de toda la vida.
• Reforzar la educación como bien público y común.

El Informe La musique dans l’éducation es igualmente importante no solo en lo que se refiere a la música, sino a la educación en general, pues su aportación a una educación integral y holística es muy valiosa. Este Informe se refiere a la “Conferencia Internacional sobre la Función y el Lugar de la Música en la Educación de los Jóvenes y de los Adultos”, organizada por la UNESCO (Bruselas, 29 junio/9 julio, 1953). Los contenidos de este Informe, a pesar de haber sido escritos hace cerca  de setenta años, mantienen su vigencia actual en su aspecto esencial, debido a los pocos cambios que se han realizado en el mundo de la educación en general.

Los siete saberes necesarios para la educación del futuro (1999), de E. Morin  (Unesco). De este filósofo, sociólogo y político se ha dicho que escribió este libro   partiendo de la idea de que existen siete vacíos profundos, en materias del ámbito de la pedagogía docente fundamentales, que son ignoradas, ocultadas o desintegradas en fragmentos. Se ha dicho también que expone una correcta preparación hacia lo que es respetar las individualidades aprendiendo a convivir entre nosotros, de manera que se permita lograr un futuro mejor enfrentando la incertidumbre de cualquier adversidad que pueda sobrevenir. Edgar Morin habla de la era planetaria, utilizando el término planetario como sinónimo de global, en el sentido que lo utilizaba Teilhard de Chardin respecto a su visión global  de toda la evolución del universo.

Todos estos Informes de la Unesco se deberían tener en cuenta por los gobiernos de cada país en materia de educación, pero no ha sido así en la mayoría de los países, entre ellos España, pues hasta el momento los ha ignorado en la práctica, a pesar de que algunas leyes de educación hayan podido incluir ciertos conceptos puramente teóricos de alguno de esos Informes. El Informe Delors dice a este respecto: “Las políticas de educación son objeto de vivas críticas o son relegadas, por razones económicas y financieras, a la última categoría de prioridades”.

En cuanto a los maestros y educadores en general, es un deber conocer estos Informes, por lo mucho que aportan a la educación, y en concreto, a la Educación Integral y Holística.

Declaraciones sobre Educación

– Declaración de Venecia, 1986 (de “La Ciencia ante los confines del conocimiento”)

– Declaración de Chicago, 1990 (de “La Alianza Global para la Transformación Educativa”)

– Declaración Mundial por la Educación Holista del s. XXI, 2010 (de “La Fundación Internacional para la Educación Holista”)

– Declaración de Incheon y Marco de Acción (para la realización del Objetivo de Desarrollo Sostenible 4), 2015

La “Declaración de Venecia” es un documento surgido de la reunión de la Unesco, en Italia, en 1986, en la que se convocó a educadores y hombres de ciencia para reflexionar sobre la ciencia y la educación en su relación con el futuro de la humanidad. Es un documento importante, donde se dice lo que deberá ser la educación del futuro: transdisciplinaria, integral, basada en la nueva ciencia, espiritual, ecológica y transformadora.

La “Declaración de Chicago” fue adoptada por 80 educadores holísticos internacionales en Chicago, Illinois, en junio de 1990. Entre sus conclusiones, figuran estas: “Al acercarnos al siglo veintiuno, muchas de nuestras instituciones y profesiones están entrando en un período de profundo cambio. Los que trabajamos en educación, estamos empezando a darnos cuenta que la estructura, los objetivos y los métodos de nuestra profesión fueron diseñados para una época histórica que se acerca ahora a su fin.

Ha llegado la hora de transformar la educación para poder hacer frente a los retos humanos y del medio ambiente que se nos presentan. Creemos que la educación en esta nueva era debe ser holística. La perspectiva holística es el reconocimiento de que toda vida en este planeta está conectada entre sí de innumerables maneras, profundas e imperceptibles.

La vista de la Tierra suspendida sola en el negro vacío del espacio, destaca la importancia de tener una perspectiva global al tratar con las realidades sociales y educativas. La educación debe promover respeto por la comunidad global de la humanidad”.

En suma, todas estas Declaraciones y demás fundamentos pedagógicos señalados, son los que dan a la Educación Integral y Holística una autoridad y una base indiscutibles, tanto desde un punto de vista psicológico, como científico y espiritual. Por eso, el educador holístico ha de poseer una formación muy amplia, que incluya los grandes descubrimientos realizados, en los últimos tiempos, por la ciencia y la psicología más avanzadas, y que están teniendo y tendrán una gran repercusión en el mundo de la educación.