by Diana
Share
Compartir
La Educación Integral y Holística en el Siglo XXI
por Valentín García
La Educación Integral y Holística en el siglo XXI
Hoy se habla en todas partes de los grandes y profundos cambios experimentados en las sociedades del siglo XX y en este siglo XXI, como algo evidente e indiscutible, pero existe un ámbito en la vida humana, la educación (la profesión más importante del mundo, según Informes de la Unesco), donde los gobiernos no están llevando a cabo los cambios que los tiempos exigen y necesitan., de parte de la mayoría de los gobiernos del mundo.
Uno de los informes de la Unesco “Replantear la educación. ¿Hacia un bien común mundial?”, de 2015, dice: “El mundo está cambiando: la educación debe cambiar también. Las sociedades de todo el planeta experimentan profundas transformaciones y ello exige nuevas formas de educación que fomenten las competencias que las sociedades y las economías necesitan hoy día y mañana. Esto significa ir más allá de la alfabetización y la adquisición de competencias aritméticas básicas y centrarse en los entornos de aprendizaje y en nuevos enfoques del aprendizaje que propicien una mayor justicia, la equidad social y la solidaridad mundial”.
Y prosigue: “La educación debe servir para aprender a vivir en un planeta bajo presión. Debe consistir en la adquisición de competencias básicas en materia de cultura, sobre la base del respeto y la dignidad, contribuyendo a forjar las dimensiones sociales, económicas y medioambientales del desarrollo sostenible. Se trata de una visión humanista de la educación como bien común esencial (…) que renueva la inspiración de la Constitución de la UNESCO, aprobada hace setenta años, al tiempo que refleja la época y las nuevas demandas actuales”.
Según los principios del antiguo paradigma, los alumnos reciben todos una misma instrucción, basada en conocimientos y enseñanzas con el fin de servir, después, a las diferentes necesidades sociales del engranaje económico. Por ello, decimos que la escuela convencional se asemeja más a una fábrica que a un centro educativo. El niño debe ser el centro de la educación y no se puede ver como un objeto más de consumo.
Es, pues, evidente que hay un desajuste cada vez mayor, entre las necesidades de los ciudadanos de la sociedad actual, por un lado, y las enseñanzas de la escuela tradicional, por otro. Esto genera graves problemas de frustración y de integración social entre las diversas generaciones, de lo cual los niños y los adolescentes son las principales víctimas. Y además, ese desajuste es también la causa de la paralización y el estancamiento generalizados que sufre la sociedad en los diversos aspectos de la vida humana y social. Es una consecuencia de la falta de una verdadera educación.
La Educación Integral y Holística valora los conocimientos de todo tipo, pero señala que lo más importante y necesario es experimentar y vivir esos conocimientos, porque la acción y el compromiso, la vivencia y la experiencia, son superiores a la teoría y las simples creencias racionales.
G. Jung, que, además de psicoanalista, dice de él mismo que fue un maestro y un educador durante décadas, dice que “la psicología no se puede aprender en ningún manual, debido a que las realidades psíquicas de las que se ocupa no pueden ser incorporadas en una definición científica; solo se aprende por la experiencia concreta”.
En la segunda mitad del siglo XX, surgieron nuevos enfoques de conocimiento, con el fin de corregir el exceso de fragmentación, especialización y reduccionismo, dominantes en la cosmovisión materialista, mediante la aparición de nuevos conceptos, como el de integración, que supone la aparición del pensamiento sistémico, holístico e integral en diversos campos, como la filosofía, la psicología, y la física cuántica. Por eso, se habla también de la medicina cuántica, de medicina integrativa, cuyos orígenes provienen de la antigua sabiduría de India y de China, y hoy es considerada como una medicina del futuro.
Nuevos Enfoques
Y podríamos preguntarnos, a este respecto, si aportan también su apoyo a la Educación Integral y Holística los planes de educación de los diversos gobiernos de nuestro entorno y los diversos Informes y Declaraciones de la Unesco (como organismo de las Naciones Unidas para la educación). En todos esos documentos y planes, no faltan las buenas intenciones y los compromisos teóricos, pero, a la hora de la verdad, casi todos ellos se convierten en papel mojado, por la falta de un compromiso verdadero de los diferentes gobiernos, y en especial de los más reaccionarios y dogmáticos.
En cuanto a la Unesco, es preciso reconocer un compromiso mayor con la educación en general, e incluso también con la Educación Integral y Holística, pero su influencia real queda casi siempre paralizada al ser los gobiernos y los estados los que han de poner en práctica esos compromisos. El Informe de 2015, que vemos en el capítulo 4, dice: “En el contexto actual de mundialización económica y liberalización del mercado, el estado debe mantener su función de garantizar el acceso y regular los bienes comunes, sobre todo en educación. Esta no debe dejarse íntegramente en manos del mercado, ya que constituye el primer eslabón de la cadena de la igualdad de oportunidades.
Y podríamos preguntarnos, a este respecto, si aportan también su apoyo a la Educación Integral y Holística los planes de educación de los diversos gobiernos de nuestro entorno y los diversos Informes y Declaraciones de la Unesco (como organismo de las Naciones Unidas para la educación). En todos esos documentos y planes, no faltan las buenas intenciones y los compromisos teóricos, pero, a la hora de la verdad, casi todos ellos se convierten en papel mojado, por la falta de un compromiso verdadero de los diferentes gobiernos, y en especial de los más reaccionarios y dogmáticos.
Al hablar de la Educación Holística como una educación para el siglo XXI, no pensamos que la educación vaya a resolver, ella sola, todos los problemas de la falta de desarrollo humano y social que hoy padece la humanidad, sino que esta educación, unida a una nueva visión del mundo, más humanista, científica y social, es un medio indispensable y poderoso para conseguir un nuevo modelo de desarrollo en general, más humano, más justo y más sostenible.
Aspectos y características de la Educación Integral y Holística:
- La síntesis (el holismo) implica integración, unión y colaboración; en cambio, el análisis (el reduccionismo) comporta fragmentación, separación y rivalidad.
- La Educación Integral y Holística es la educación basada en los conceptos de totalidad, integración, unidad y síntesis. Cada totalidad se integra en una totalidad mayor, teniendo en cuenta que lo colectivo, lo que va dirigido a beneficiar al grupo, es superior a lo individual. Por ello, la conciencia grupal o colectiva es una conciencia más evolucionada que la conciencia individual.
- Dice Gallegos Nava: “La educación holista es una pedagogía del amor incondicional, un proceso para formar seres humanos integrales, un conducto para nutrir lo mejor del espíritu humano”.
- Esta educación se sitúa en el centro de la vida del ser humano; por eso, según el matemático y filósofo inglés A. N. Whitehead, “solo hay una materia de estudio en la educación: la vida en todas sus manifestaciones”.
- Esta educación enseña, no para superar los exámenes, sino a aprender a vivir. Es un viaje a lo largo de toda la vida, propio de la Escuela de la vida, en la cual no hay competición ni premios, sino participación y colaboración.
- Al ser una Educación Integral, se dirige a todas las dimensiones e inteligencias del ser humano. La inteligencia -según Gallegos Nava- es de naturaleza diferente al pensamiento, es holística, no está basada en el conocimiento ni en el tiempo e implica un sentido espiritual. Esta educación ha estado siempre presente en la mente y la vida de los más grandes pedagogos y educadores.
- La Educación Integral y Holística no se opone, sin más, a la enseñanza convencional, sino que la complementa y la trasciende.
El ser humano desde la perspectiva holística:
- No es un objeto cosificado, es un ser único, formado de la dualidad espíritu/materia, alma/cuerpo.
- En tanto que alma o Ser, el ser humano toma dimensiones únicas.
- El aspecto Ser o alma ha sido olvidado en la civilización moderna, la cual se ha centrado únicamente en el cuerpo y la materia.
- La Educación Integral y Holística es consciente de esta gran limitación del ser humano; por eso trata de llevar a cabo una Nueva Educación que ayude a desarrollar todos los niveles de la persona: físico, biológico, emocional, mental, espiritual y social.
Esto se puede aplicar perfectamente a la educación, y hablar, así, de una verdadera educación y de una pseudoeducación. Esta última sería la enseñanza convencional, mientras que la verdadera educación es la que aquí denominamos Educación Integral y Holística. ¿Por qué decimos que esta educación es verdadera? Porque se atiene, en todo momento, al método científico, respecto a la seriedad y la responsabilidad, y se basa en la observación y en lo experimentalmente comprobable o rechazable, diferenciándolo de lo erróneo, lo dogmático, lo no basado en la experiencia, lo que no es susceptible de comprobación ni de rechazo.
PERMAMECER AL DIA